CIPed
Ciertos recursos tecnológicos se convierten en herramientas que colaboran en los procesos de inclusión educativa, laboral y social de las personas con discapacidad, pues permiten el aprovechamiento de los sentidos disponibles, derriban las barreras físicas del tiempo y el espacio, y posibilitan nuevos modos de comunicación e interacción social (García Bilbao y Rodríguez-Porrero, 2000).
Ahora bien, para conseguir el mayor aprovechamiento de estas tecnologías estas deben ser accesibles por todos los usuarios con discapacidad. Si bien la accesibilidad en TIC es una temática amplia pues involucra factores de diseño del equipamiento (hardware), de los programas (software), factores sociales (barreras culturales y de educación); en este trabajo se [hace] foco en el segundo grupo y, fundamentalmente, sobre los aspectos que hacen a la accesibilidad de las páginas web.
Para poder alcanzar la accesibilidad en Internet, tanto para usuarios con discapacidad, así como con otras necesidades, [el World Wide Web Consortium (conocido como W3C)] elaboró un conjunto de recomendaciones. Éstas llevan el nombre de Pautas de Accesibilidad del Contenido Web (WCAG, por sus siglas en inglés). Desde el año 2008 hasta la actualidad, se encuentra vigente su versión 2.0.
Las normas de accesibilidad se encuentran estructuradas bajo cuatro criterios, los cuales deben ser cumplidos por las páginas en Internet para ser accesibles:
Documentos digitales
Los textos tienen una estructura compuesta por encabezamientos, títulos, párrafos, etc. Antes de comenzar a escribir un texto, lo mejor es crear un estilo con los formatos deseados y aplicarlo luego a todo el documento. Esto facilita la navegabilidad a las personas con dificultades visuales.